RESULTA QUE SE HIZO VIRAL el llamado de una agrupación feminista veracruzana, para que las mujeres realicen un paro nacional como protesta ante la violencia feminicida que vive el país. “El nueve ninguna se mueve, un día sin nosotras, paro nacional”, dice el cartel que publicaron. Lo malo es que de inmediato surgió el oportunismo político y mientras unos buscaron montarse otros descalificaron e iniciaron los intentos para revertir y capitalizar a su favor el impulso de una iniciativa apolítica y apartidista, al decir de sus promotoras. Como era de esperarse, de manera temprana, mañanera pues, López Obrador, anunció: “Que se manifiesten las mujeres, están en su derecho. Nuestro gobierno garantiza el derecho a disentir, el derecho de manifestación, nada más que mucho ojo, porque ahora los conservadores ya se volvieron feministas”. La esposa del presidente, Beatriz Gutiérrez Mueller, promovió una variación del cartel: “El Nueve me mueve, un día más con nosotras, no al paro nacional, mujeres y hombres con pañuelo blanco apoyamos a AMLO y también queremos erradicar la violencia, trabajemos para el crecimiento de nuestro país”. Descalificar acusando que hay mano negra o intereses oscuros atrás de una propuesta, manipular para que se reviertan los efectos y una movilización ciudadana se convierta en una manifestación de apoyo a quien en toda expresión que siente adversa, ve moros con tranchete, es, a todas luces, oportunismo puro. Ante los señalamientos, Brujas del Mar, ha aclarado en sus redes sociales: “Hemos respondido a varias compañeras que la imagen del paro la hicimos nosotras, una colectiva de jarochitas con una propuesta que jaló a niveles inesperados. Está bien gacho que digan que está orquestado por la derecha, ofende más que cuando nos dicen feminazi la neta jajaja”. No hay que revolver las cosas, que la sociedad se exprese libremente. Sin etiquetar y sin buscar dobleces, que se apoye el llamado a movilizarse para hacer conciencia sobre los problemas que enfrentamos. Que se den facilidades a las mujeres para que se manifiesten, sin buscar sacar provecho de su causa. Que se dejen polarizaciones y populismos al margen y se escuchen las voces que han decidido expresarse. Nada perdemos con ello y sí podemos ganar mucho.
DON ARTURO ANTONIO SZYMANSKI no se fue, sigue entre nosotros, aquí está presente. Dijo Efraín Álvarez, en el panegírico que pronunció en la comida que en su memoria, organizó un grupo de amigos que año con año se reunían con el apreciado líder espiritual. Daniel de la Llera, leyó Gracias a la Vida, de Alberto Cortez, recordando que en febrero de 2018, leyó esa misma obra, a petición de monseñor Szymanski. Fue en la última fiesta de cumpleaños con él, pues en mayo de ese año falleció. El padre Héctor Colunga Ramírez, rememoró sus vivencias con don Arturo Antonio Szymanski, destacando la manera de motivar a los sacerdotes. María Mercedes Gámez Martínez, la Madre Meche, habló sobre la forma de ser del recordado personaje, destacando sus virtudes y celo apostólico. El señor Manuel Balderas, manifestó que el padre Szymanski se metió en el corazón de todos sus amigos, por lo que siempre estará con nosotros. Es un punto de unión importante entre los que lo tratamos y sus enseñanzas y ejemplos son trascendentes, dijo. Empresarios, vecinos de la casa donde vivió, periodistas, profesores, padres de familia y quienes integraron el Centro de Catequesis San José del Buen Consejo, que funcionó bajo la guía del padre conciliar, fueron parte de la concurrencia. Lorena Valle, Cecilia González, Martín Juárez, Juan Manuel Leos, Rafael Arellano, Gerardo Pérez Mota, Ernesto Anguiano, Gustavo Robledo, Alfredo Narváez, Miguel Ángel Guerrero, Pedro Cervantes, Marco Antonio Hernández, J. Isabel Ortega Aldama, Marcela Rocha, Jesús Medina, Angélica Maldonado, José Gutiérrez Guillén, estuvieron entre los asistentes. René Díaz González, llegó cargando un gran pastel, que alcanzó para todos. Acompañado de su esposa, la señora Elizabeth Rapp, el doctor Jaime Chalita Zarur, fue el anfitrión, cumpliendo el compromiso que hace algunos años hizo con el entonces arzobispo emérito: “usted cumpla años y nosotros nos encargamos de festejárselos”. Chalita Zarur, afirma que la sociedad necesita líderes espirituales, por lo que a los que tenemos debemos darles su lugar y procurarlos. El padre Szymanski le tuvo un especial aprecio y fue notoria su amistad.
NOS TOCÓ CONDUCIR el programa y recordamos que el padre nos dijo una vez que su interés era estar cerca de los sacerdotes, porque son la base de la Iglesia; de los padres de familia, porque ellos tienen a su cargo la formación de los hijos; de los profesores, porque ellos educan a los niños; de los empresarios, porque ellos deben impulsar el desarrollo de la clase media; de los trabajadores, porque de ellos depende que haya lo que se necesita. Entonces usted tiene muchos rebaños, le dijimos. Sí, nos respondió, con su especial sentido del humor, pero no sé si todos sean de ovejas. Recordando al gran pastor que fue y que, como dijo Efraín Álvarez Méndez, no descansa en paz, pues fiel a su estilo, de seguro allá en el cielo, sigue orando por la grey católica que tuvo y sigue teniendo a su cuidado, NOSOTROS DECIMOS:
Szymanski por su cumpleaños
Desde el cielo da bendiciones
A sus múltiples rebaños
¡Y a su hato de… cabritos!
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