• Se registró una muerte por golpe de calor.
• Hay personas hospitalizadas graves debido a golpe de calor.
• Necesario proteger a niñas, niños y personas adultas mayores, son más vulnerables a golpe de calor y enfermedades diarreicas.
La ola de calor que se vive en el país y en el Estado hace urgente que la población en general evite exponerse a las altas temperaturas, principalmente entre las 10:00 y las 16:00 horas que el sol está más fuerte, ya que pueden sufrir un golpe de calor, y se les pide mantenerse hidratados bebiendo suero o agua simple aunque no se tenga sed, consumir frutas y verduras bien lavadas, evitar bebidas con alto contenido de azúcar o cafeína, reducir la actividad física a la intemperie, mantener habitaciones ventiladas, se recomienda amamantar a los bebés lactantes con mayor frecuencia.
El Gobierno de Ricardo Gallardo Cardona, a través de los Servicios de Salud de San Luis Potosí informa que se registró una muerte por golpe de calor, en una mujer de 88 años en el municipio de Ciudad Valles, que contaba con factores de riesgo enfermedades crónicas diabetes mellitus e hipertensión, y tres personas más se encuentran hospitalizadas, en estado grave, debido a golpe de calor.
También en la región Huasteca, se ha incrementado el número de personas con deshidratación, por lo que se hace urgente que potosinas y potosinas, sigan las medidas de prevención contra enfermedades por calor. Atendiendo las instrucciones del Gobernador, se trabaja de forma coordinada los Servicios de Salud a través de las Jurisdicciones Sanitarias V de Valles, VI de Tamazunchale y VII de Tancanhuitz con los Ayuntamientos de la Huasteca Potosina y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para realizar una mejor vigilancia y atención de los casos que se presenten.
El golpe de calor ocurre cuando el cuerpo pierde agua, sales y minerales, la mayoría de las veces como consecuencia de la exposición prolongada a altas temperaturas, si no se trata a tiempo puede dañar el cerebro, corazón, riñones, músculos e incluso producir la muerte; las personas adultas mayores, bebés, pesonas con enfermedades cardiovasculares o respiratorias son más propensos a padecerlo, también quienes trabajan a la intemperie. Si presenta sudor, piel fría, mareos, fatiga, pulso débil, calambres, dolor de cabeza, náuseas o presión baja, acuda a recibir atención médica.