El avión presidencial TP01 se ha intentado vender, rifar y arrendar, pero ninguno de esos planes ha prosperado, por lo que ahora el gobierno federal busca rentarlo —como una limusina— para bodas, 15 años o viajes de negocios.
Ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador informó que el Boeing 787 Dreamliner será entregado a la empresa militar Olmeca-Maya-Mexica, que operará el AIFA, el Tren Maya y los aeropuertos de Tulum, Chetumal y Palenque para que pueda rentarlo y tener ingresos. Señaló que la renta será para pagar sus gastos y mantenimiento.
Aseguró que las Fuerzas Armadas decidirán si el avión permanece en el extinto hangar presidencial del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México o si se envía a la base militar de Santa Lucía.
“Si alguien quiere porque se va a casar, ya lo pensó bien, y va a llevar a sus familiares y amigos, o 15 años o cumpleaños o una empresa que quiera darle un reconocimiento a sus trabajadores, lo renta para ir a Cancún o Los Cabos”, dijo.
El Mandatario detalló que se conservará el avión presidencial tal como está porque “es una cosa impresionante, es muy lujoso, es una experiencia”.