DE ACUERDO CON UNA EXPERTA EN PATERNIDAD DEL REINO UNIDO, LOS PADRES QUE PERMITEN QUE SUS HIJOS VEAN LA SERIE EL JUEGO DEL CALAMAR PUEDEN ESTAR FOMENTANDO A LOS “BULLIES” DEL FUTURO A MEDIDA QUE CRECEN.
La psicóloga social Sandra Wheatley, con sede en Londres, aseguró al Daily Mail que el programa violento de Netflix podría impedir el “desarrollo social y emocional” de los niños pequeños, alentándolos a normalizar la violencia en sus escuelas, o incluso a unirse, cuando otros estén bajo ataque.
La serie rompió récords en la plataforma de streaming el mes pasado, superando los 111 millones de espectadores a nivel mundial, la audiencia más grande de Netflix hasta el momento.
El Juego del Calamar ve a sus personajes competir en un torneo mortal de juegos para niños por un premio en efectivo. En casi cada turno, el programa muestra actos de violencia física y emocional que se acumulan sobre sus involucrados, lo que finalmente resulta en su muerte hasta que se corona a un ganador.
Sin embargo, “es posible que nuestra generación más joven no comprenda el contexto del programa”, según Wheatley.
“Puede hacer que se pregunten: ‘¿Por qué nadie los está ayudando?’. Claramente, hay mensajes allí que realmente no queremos que nuestros hijos tomen en cuenta”, explicó la británica al diario.
“Eso bien podría sacudir los cimientos de lo que se les enseña en la escuela, que es que nos debemos preocupar y ayudarnos unos a otros”.
Su declaración se produce después de que una escuela primaria en Bélgica a principios de este mes advirtiera a los padres sobre El Juego del Calamar después de descubrir que los estudiantes recrean juegos peligrosos en el patio de recreo como se muestra en el programa.
“¡Debemos permanecer atentos para que se detenga este juego malsano y peligroso”, decía un anuncio de la escuela en Facebook, después de que se viera a los estudiantes golpeándose unos a otros como penitencia por perder en el juego “Luz roja, luz verde”. En la TV, los descalificados en el juego son asesinados.
Wheatley dijo que la serie está enviando a los niños un mensaje equivocado sobre cómo manejar el acoso en público.
“No nos quedamos al margen si somos testigos de una injusticia. Si vemos que alguien más está siendo acosado o lastimado, se lo decimos a un maestro y no nos unimos o nos alejamos”, reflexiona la experta.
Algunos padres de la comunidad de Mumsnet con sede en el Reino Unido admitieron haber dejado que sus hijos vieran el programa, según el Daily Mail.
“Lo veo con ella en la habitación. Adelanto escenas de sexo o violencia realmente brutal, pero ella sabe que no es real”, escribió en redes una madre de una niña de 8 años.
Otros condenaron el programa y a los padres que permiten su visualización bajo su techo.
“Los padres escandalosos permiten que sus hijos vean programas violentos”, dijo un usuario en redes sociales, mientras que otro agregó: “Es negligencia infantil, muy triste”.
