Chorcha. Femenino. Grupo de personas que se reúnen para charlar y pasar un buen rato.
Este fin de semana, nos dimos la oportunidad de visitar la Titería, llamada así porque es un teatro (por ahora al aire libre y con todas las medidas sanitarias) en el que las Estrellas son títeres, muñecos de todo tipo y variadas técnicas de movimiento.
Aunque seguramente habrá más obras que ver, ésta, llamada La Chorcha de las Calacas estaba por terminar sus funciones, puesto que es tema de la temporada de Día de Muertos en Mexico.
Así que, fuimos a verla.
Me gustó mucho. Más aún , me gustaron los niños que asistieron, en silencio, encantados por los muñecos que mágicamente cobran vida y nos hacen olvidar a las personas que los están moviendo.
Más aún, me gustaron los adultos que asisten, unos acompañados por niños, pero otros tantos, como nosotros, sin el pretexto de los niños, simplemente para recordar nuera infancia, la época en que toda fantasía es posible y más real que aquello que podemos tocar.
La Catrina nos presenta una serie de personajes de nuestra historia, tales como Leona Vicario, Frida Kahlo, Guadalupe Posadas, Moctezuma y muchos más, relatando sus situaciones de vida e historia de una manera muy entretenida.
La obra contiene bailes, canciones populares, chistes. Nos llevó a reír con ganas y a evocar momentos llenos de ternura. A querer levantarnos y bailar.
Casi no puedo esperar a la siguiente ronda, para regresar y deléitame con el trabajo es estos maravillosos artistas, que rescatan un arte que nunca, nunca debemos olvidar.
Con amor y deleite en mi corazón de niña,
Marissa Llergo.
