Como hace años no se veía, la violencia se desató ayer en esta frontera, con un saldo preliminar de al menos 10 muertos, 10 lesionados, comercios y vehículos incendiados y una ciudad sumida en el miedo, presuntamente a raíz de una riña entre bandas rivales en el Centro de Reinserción Social estatal (Cereso) Número 3.
Por la noche continuaban los reportes de ataques a civiles y hechos violentos en diferentes puntos de la metrópoli.
Todo inició alrededor de las 13:00 horas, cuando se reportó una pelea dentro del Cereso Número 3. Extraoficialmente se informó que el enfrentamiento fue entre miembros de Los Chapos y Los Mexicles, pandillas rivales, pero ambas vinculadas al Cártel de Sinaloa.
La Fiscalía General del Estado (FGE) confirmó que en la riña murieron dos personas privadas de la libertad, quienes fueron identificadas como Kevin Alan C. A. y Raúl Abraham S. O. También se reportaron cuatro heridos.
La violencia se desató durante la hora de visita, por lo que decenas de familiares estaban dentro del penal.
“Parece que entró el diablo”, expresó una mujer, familiar de un detenido, quien relató cómo hombres armados vestidos de civiles fueron los que iniciaron la pelea.
Agresiones generalizadas
Hacia las 16:00 horas, las autoridades informaron que se había contenido la riña dentro del penal, pero la violencia estaba por desatarse en la ciudad.
A esa hora comenzaron los reportes sobre ataques contra tiendas de conveniencia, diversos comercios, así como asaltos y personas lesionadas por ataques con arma de fuego en diferentes puntos de la metrópoli.
Hombres armados abrieron fuego contra una pizzería en el oriente de la ciudad, con un saldo de cuatro muertos y un herido, de acuerdo con el informe de la policía municipal
En una sucursal de Oxxo, ubicada en la colonia Infonavit Ampliación Aeropuerto, se reportó la muerte de dos mujeres, una empleada y otra joven que iba a dejar su solicitud de trabajo.
A la par, dos personas fueron ejecutadas en distintos hechos; una gasolinería y otra tienda Oxxo fueron atacadas a balazos, mientras que un camión fue incendiado en Riberas del Bravo.
También había reporte de heridos en diferentes ataques con armas de fuego contra algunos comercios y una amenaza de bomba en una maquiladora.
Ante la ola de violencia, muchos negocios decidieron cerrar sus puertas, sobre todo los de tiendas de conveniencia.
Al cierre de esta edición, el gobierno del estado no se había pronunciado sobre la situación.