LA NUEVA VARIANTE DE SARS-COV-2, BAUTIZADA POR LA ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD (OMS) COMO ÓMICRON, PROVOCÓ AYER QUE VARIOS PAÍSES ANUNCIARAN PAUTAS PARA RESTRINGIR LA ENTRADA DE PERSONAS PROCEDENTES DE DISTINTAS NACIONES DEL SUR DE ÁFRICA.
Reino Unido fue el primero en suspender los vuelos provenientes de Sudáfrica, Namibia, Lesoto, Zimbabue, Botsuana y Esuatini, donde ya se han registrado casos de la variante B.1.1.529. Además, exigió a los viajeros británicos que lleguen de esta región alojarse en hoteles de cuarentena.
La nueva variante se ha detectado además en Hong Kong e Israel, e incluso alcanzó a Europa, con al menos un caso reportado en Bélgica de una persona que no estaba vacunada y que llegó desde Egipto.
Ante la situación, la Unión Europea recomendó a las 27 naciones del eurobloque imponer restricciones a todos los viajes procedentes de África austral para evitar la propagación de la nueva variante, aunque países como Francia, Italia y Holanda ya se habían adelantado.
Guatemala, Argentina y Brasil fueron los primeros países de América Latina que suspendieron la entrada y salida de vuelos desde y hacia el sur del continente africano.
En norteamerica, Canadá cerró su frontera aérea con esa región y Estados Unidos suspendió los vuelos y prohibió la llegada de viajeros sudafricanos. En caso de ser residentes deberán dar negativo a la prueba de Covid-19.
La OMS desaconsejó a las naciones poner medidas a los viajes reiterando que en esta fase los Gobiernos deben basarse en un enfoque científico, y que hasta el momento hace falta mayor investigación para analizar la amenaza real de Ómicron.
Dicha institución clasificó ayer a la B.1.1.529 como una variante “preocupante” por su alto número de mutaciones y su rápida propagación entre los jóvenes de Gauteng, la provincia más poblada de Sudáfrica.
Ómicron se notificó por primera vez en dicho país el pasado 24 de noviembre, pero casi al mismo tiempo, de acuerdo con The New York Times, en Botsuana se reportaron casos con la nueva variante.
Científicos de la OMS advirtieron que podría tomar semanas comprender plenamente las mutaciones y cuánto afecta la efectividad de las vacunas contra el Covid-19.
Theodora Hatziioannou, viróloga de la Universidad Rockefeller en Nueva York, planteó en una entrevista con el Times que existe la posibilidad que las mutaciones distintivas de Ómicron evolucionaron por primera vez dentro del cuerpo de una persona con VIH.
Según Hatziioannou, el virus habría permanecido en la personas durante meses ganando capacidad de evadir anticuerpos.