EL ESTADO ACEPTA REACTIVAR LA INDUSTRIA, PERO NO ABRE ESCUELAS.
Con el pico de la pandemia de COVID-19 en San Luis Potosí previsto para fin de mes, el estado se apresta a cumplir el mandato federal de entrar a la “nueva normalidad”, periodo en el cual se reactivarán la industria del transporte, de la construcción y la minería, que sacaría de la cuarentena a 130 mil trabajadores, según dijo el gobernador Juan Manuel Carreras López.
La incertidumbre sobre la expansión del mal en esta nueva fase de la pandemia se refleja en el hecho de que el gobierno del estado optó por no permitir la reactivación de la educación presencial en junio, ordenando que durante el mes entrante continúe la educación a distancia.
Los ordenamientos de la nueva fase de la pandemia, que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador bautizó como “nueva normalidad” fueron presentados la mañana de ayer, e incluyen la declaración como actividades esenciales la industria automotriz, la minería y la construcción, que podrían funcionar plenamente el 1 de junio, tras un periodo de preparación que inicia el 18 de mayo.
También incluye la semaforización de la situación de las entidades, de la cual dependerá la reactivación de actividades. En el caso de San Luis, fue incluido entre las entidades con un nivel de alerta bajo y con una tendencia al alza.
Esta nueva fase arranca cuando la pandemia en San Luis Potosí, de acuerdo a la Secretaría de Salud estatal, no llega aún a su pico, pues hay un desfase con la situación nacional. El máximo de contagios de la enfermedad se registraría, según la dependencia estatal, hasta fines de mayo y principios de junio, precisamente cuando arrancaría la reactivación de las actividades económicas.
Debido al temor a que se disparen los casos, la administración estatal optó por no permitir la reanudación de clases presenciales durante junio en todo el estado, decretando la continuidad de la educación remota.
En conferencia de prensa, Carreras López se congratuló de que “no se juntaran estas dos actividades (la laboral y la educativa), y más si tomamos en cuenta de los pronósticos de contagio”.
Con información de Jaime Hernández / PULSO.
