EMPRESA ESTÁ TERMINANDO CON EL ECOSISTEMA EN ESTA ZONA NATURAL TAN IMPORTANTE
TAMUÍN, SLP.- Contaminación grave, afectación a los ecosistemas regionales así como daños severos a la Sierra de Tanchipa, son los problemas que se enfrentarán en la región, lo cual será aún más grave, al “romper” Cemex México la sierra ubicada en el ejido Las Palmas, lo cual se denunció en reiteradas ocasiones sin que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la Procuraduria Federal de Protección al Ambiente (Profepa) a nivel federal o la Secretaría de Ecología y Gestión Ambiental (Segam) hayan tomado en cuenta las quejas, pese a que hay fotos y videos que muestran el grave daño ocasionado.
El apoderado legal del ejido Las Palmas, Ernesto Márquez Torres, hace responsable de este daño ecológico a Cementos de México que esta a punto de “romper” el macizo de piedra de la Sierra de Tanchipa, lo que provocará daños irreversibles, pero es aún más grave el daño que por años ha afectado los ecosistemas, por las emisiones generadas.
Señaló que el ejido las Palmas tiene más de 10 años denunciando a la empresa cementera de estar destruyendo la Sierra de Tanchipa, pero ninguna autoridad, tanto estatal como federal, los ha tomado en cuenta, por lo que tal parece que la ley para la protección de los recursos naturales no existe o las autoridades no quieren aplicarla y clausurar Cemex México, así como las termoeléctricas, que causan problemas graves de contaminación.
La extracción de piedra por parte de la cementera está destruyendo la Reserva de la Biosfera Sierra Abra Tanchipa desde hace años, pero en los últimamente el riesgo es que la sierra está a punto de desaparecer, lo que alterará el clima y todo lo que ahí existió. Además del uso en grandes cantidades de dinamita, parte del proceso para extraer piedra caliza. Todo ello causa modificaciones profundas e irreversibles en ecosistemas, de manera grave, pero pese a esto ninguna autoridad ha actuado.
Otra situación que el gobierno federal no quiere atender es que este ejido fue despojado de 800 hectáreas para la reserva de Abra-Tanchipa, pero nunca fueron indemnizados ni tomados en cuenta para decretar como reserva los terrenos: “sabemos que llegan millones de pesos para los dueños de la reserva pero el supuesto director de la reserva los usa para acciones que beneficien a Cemex México, no a los ejidatarios”, dijo.